miércoles, 10 de marzo de 2010

Hoy lloré ira

Tiene razón, mamá, cuando dice que lloro haciéndome responsable por cosas que no corresponden. Hoy lloré. Debo confesarlo. En el baño de la productora, sola, durante cinco minutos. No lloré problemas, ni soledad ni dolor de ovarios. Lloré para no matar. Lloré porque mi clienta de hoy no me entendía. Y no se hacía entender. Porque estaba empeñada en echarme la culpa por un error que no era mio. Me defendí, cuanto pude, pero no fue suficiente. "Vos lo hiciste mal" me repitió, y yo empecé por dentro, a llorar angustia. Y seguí defendiéndome, pero no bastó. "Te equivocaste" me volvió a decir, y yo empecé a llorar dudas. ¿Me había equivocado yo? No. Me paré derecha, suspiré profundo y le dije no no y no: esta vez, no es mi culpa. Se calló. Al rato siguió. Hasta que dijo "yo creo que" y se quedó ahí, en pausa, suspendida, durante dos minutos eternos en los que no dijo ni media palabra. Y yo, que estaba harta de su actitud, su mal aliento, su creerse que es algo que claramente no es, su permamente echada en cara de errores que no eran mios, sus silencios inentendibles y su irritante incapacidad para decir "me equivoqué", le pedí permiso, y caminé rápido por el pasillo, me encerré en el baño, y lloré. Hoy lloré ira. Cinco minutos de ira incontrolable transformada en las lágrimas mas gordas y los sollozos mas ridículos. Cuando volví a sentarme frente a la computadora, ya no tenía tantas ganas de matar, asi que sonreí, y empecé a editar.

8 comentarios:

LeO dijo...

A veces es mejor matar que llorar.

Grisela dijo...

quiero saber dónde trabajás, y a qué te dedicás? sos traductora o algo por el estilo?

Anónimo dijo...

<>

Lila Biscia dijo...

ufff si, te re entiendo y comparto ese accionar (que aunque quiera evitarlo, lo hago)
Besos, me encantan todos tus post de hoy.

eMe dijo...

Y seguro volviste más relajada, pero qué bronca esa gente!!!!

Anónimo dijo...

La hubieses agarrado del cogote!!! Sería más saludable! ;)

Nuri148 dijo...

Si habré llorado lágrimas de ira... Y las odio, pq para los otros -si es q no llegaste a acovacharte a tiempo para q no las vean- quedas como una pelotuda llorona, y no, no es angustia, no es culpa, no sensibleria, es ira pura y tan pero tan conchuda que en lugar de los puños y la lengua sale por los ojos... ¿vendremos mal cableadas de fábrica?

carlos dijo...

m te entiendo perfectamente besos