miércoles, 29 de junio de 2011

Zapping de la vida cotidiana

Mirar la televisión me produce muchísima incomodidad. Alguno programas son tan berretas que me estremecen, me dan escalofríos y ganas de taparme la cara con la almohada hasta dejar de respirar. Realities imposibles de niñas que compiten por ser mini reinitas de belleza, concursos de bailes con rutinas graciosas guionadas, cocineros afilando cuchillos para matarse entre ellos, todas esas cosas que son vergonzosas, que son imposibles de ver. Pero la televisión tiene una grandísima ventaja: control remoto. Apretando un botón puedo salir del estado de vergüenza ajena que me genera una nena con una tanga diminuta que se presta a las barbaridades que le dicen o programas periodísticos con conductores que regalan angelitos. El control remoto es mi salvación, el zapping mi religión.

Me encantaría poder inventar un control remoto para la vida cotidiana. Ir en el colectivo y escuchar cómo una madre maltrata al hijo y poder cambiar de canal o poner pausa o hacer algo así. Salirme de la incomodidad que me genera ver a una vieja chota maltratando a un mozo, cambiar de canal cuando un tipo en el colectivo ronca al lado mio y me produce asco. Sería un método completamente autoritario y dictatorial, todo lo que no me gusta desaparecería y habría un mundo lindo sin gente maltratadora y conchuda porque sí. Un mundo más feliz.

5 comentarios:

Gabba dijo...

Quiero vivir en un mundo así.

Lucía dijo...

control universal para todo el mundo!

Mechi. dijo...

Yo hace meses que no miro tele, termino cansada de la rutina de todo el día, y de estudiar, aparte cuando tengo tiempo libre leo o escucho música. Creo que la única vez que hice zapping fue una noche para ver si me perdía de algo o no, y la verdad que no había nada interesante, sera posible.

Pero la televisión últimamente esta simplemente de adorno en mi cuarto.

Paul Maril dijo...

No existe el dictador bondadoso

Anónimo dijo...

Tengo la solución:
una pastillita de soma-zaping
y adiós problemas

zin