viernes, 13 de mayo de 2011

Existe

Durante mucho tiempo dudé. Sentí miedo. Sentí que no podía volver a creer. Que no existía el amor sin drama. Que sí existían los engaños, las mentiras y los desencuentros. Los conflictos. Los corazones rotos. El llanto. La espera desesperada por ese que nunca iba a venir. O que nunca iba a volver. Sentí muchísimo miedo, pensando que para que existiera el amor tenía que existir todo ese drama que ya no estaba dispuesta a soportar.

Hace un año me di cuenta que estaba equivocada. Que existe el amor sin sufrimiento. Sin esperas ridículas. Sin luchas de poder. Sin conflictos. Con mucha risa y compañía. Con cariño, con sexo, con verdad, alegría y pasión. Con emoción. Con silencios y charlas interminables. Hace un año me di cuenta que el amor, ese amor sin drama, existe. Un año. Como pasa el tiempo, la concha de la lora.

10 comentarios:

Miss Bgui dijo...

AMOOOOOOOOOOOOOOR

:D

Anónimo dijo...

aaaaaaaaay que ganas.
yo se que existe pero que no me va a tocar nunca
que lindo

Sil dijo...

Pero si ponés un video de Iggy yo tengo que hablar de Iggy y no te comento el post, es terrible esto. Ay Iggy, ay Iggy Iggy Iggy.

Lila Biscia dijo...

te juro, pero te juro, que me da esperanzas leer esto.
y me alegro mucho :)

Vebu dijo...

Qué lindo! Te felicito y me alegro mucho.
Un beso a los dos.

Eli dijo...

Coincido totalmente con Lilus. Evidentemente estamos todos -algunos un poco más, otros un poco menos- descreídos del amor sin novela, sin quilombo, del amor por el amor. Pero es esperanzador saber que sigue pasando.

Que lindo M. :)

Carolina dijo...

Me pasó. Exactamente así.
El mes pasado cumplimos 12 años.
Y cada año es mejor.

Anton Cannobal dijo...

Que bien hace leerte, diste ánimos :) Claramente existe, pasa que a veces uno mismo los espanta porque se vuelve dependiente del melodrama. En fin, buen blog!

Anton Cannobal dijo...

Que bien hace leerte :)
Claramente existe, pero muchas veces uno espanta esos amores por costumbre a los melodramas. En fin, buen blog!

malena dijo...

Qué lindo Maru! Existe nomás!